Los NO que nos decimos: los límites de nuestra grandeza
Hoy quería hablarte de los límites. Y es que últimamente parece que está de moda.
De lo importante que es aprender a poner esas barreras con tu familia, amigos, jefes…que protegen nuestras necesidades, deseos, tiempos…
Y claro que es necesario.
Pero como siempre vengo a contarte la otra cara de la moneda. No quiero que pongas foco en lo que pasa ahí afuera.
Sino de lo que pasa aquí adentro💙
Aquellos límites que te pones (o no te pones) a ti mismo.
¿Te escuchas? ¿Te cumples?
¿Respetas lo que te prometes?
¿Honras tus propios NOES?
También hay NOES que vienen de tí, y ese es otro límite del que te quería hablar.
Un tipo de “NO” que no viene de afuera, te lo dices tú. Y muchas veces ni te das cuenta.
Son aquellos que actúan desde la sombra, y que te niegan en lugar de cuidarte
“No soy capaz”, “no estoy listo”, “no puedo permitirme eso”, “no soy suficiente”.
Pero lo más importante es entender esto. Esos límites no tiene que ver con poner límites a otros.
Tienen que ver con ponértelos a tí, cómo te niegas amor, oportunidades, etc.
Nos los decimos para no darnos, para no vernos, para no abrazarnos del todo.
Porque si de verdad nos amáramos (sin juicio, sin exigencia, sin condiciones)
no nos racanearíamos nada.
No nos negaríamos los sueños.
No nos esconderíamos talentos.
No nos negaríamos el permiso de intentar, fallar, aprender, brillar…
Esos NOES que nos decimos son el núcleo de nuestras creencias limitantes.
Las que aprendimos, heredamos, repetimos sin darnos cuenta.
Pequeñas leyes internas que moldean lo que creemos posible… y lo que sentimos que merecemos.
Estas preguntas te las hago para que tomes conciencia de tus NOES internos:
¿Qué NO me permito?
¿Qué NO acepto de mí?
¿Qué NO respeto de lo que soy?
¿Qué NO me dejo soñar?
Si te cabreas al descubrir alguno de estos NOES, no lo reprimas. Usa ese cabreo como motor y como una señal de que ahí hay energía bloqueada lista para liberarse.
El NO también es maestro
Como ya he comentado en alguna ocasión.
Cuando la vida nos lo pone complicado, nos levantamos hasta conseguirlo.
El No forja. Quien tiene éxito no es quien tuvo suerte, sino quien coleccionó fracasos y aprendizajes y obtuvo NOES sin rendirse. Cada No que recibimos lo podemos tomar como una dosis de carácter, de reto y de creatividad para volverlo a intentar.
Cada NO implica un SÍ
Cada vez que te dices NO, le estás diciendo SÍ a otra cosa.
Cuando te dices NO al autosabotaje, te estás diciendo SÍ al cuidado.
Cuando te dices NO a seguir en piloto automático, le dices SÍ a tu vocación.
Cuando te dices NO a esconderte, te estás diciendo SÍ a tu Ser.
A veces, esos NOES pueden desbloquear algo muy grande dentro de tí.
¿Qué haría si no tuviera miedo?
¿Qué parte de mí escondo porque, si la muestro, ya no podré seguir negándome?
¿Qué NO heredado ya no me representa?
¿Qué sigo esperando que me den otros… que en realidad necesito darme yo?
Te propongo algo...
Si este texto algo ha encendido dentro de ti…
Te invito a una sesión de hipnosis QHHT conmigo para:
Explorar lo que hay en tu sombra, sin juicio ni miedo.
Abrazarte con amor, incluso en las partes que has querido esconder.
Reconocer los NOES internos que ya no necesitas.
Reconectar con tu propósito, tu sabiduría interior y tu poder personal.
Recordar que dentro de ti siempre hubo una voz que decía: “sí, sí puedes”.
La hipnosis no es magia, es volver a ti. Y yo te acompaño en ese viaje.
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O escríbeme si quieres saber más. Tal vez este sea el momento en que empiezas a decirte SÍ.
Con amor💙
Gabi
